- Los litigios son un canal a través del cual se puede comunicar tecnología, políticas e investigación a quienes toman decisiones. Prepara tus argumentos legales de forma tal que creen espacios para testimonios de expertas o declaraciones juradas.
- Haz que tus mensajes sean firmes pero simples. Crea representaciones gráficas claras de puntos claves; una imagen, diagrama o analogía convincente puede captar la atención del jurado o el juez y ayudarlos a entender mejor las complejidades técnicas y legales del caso.
- Incluye a los y las colaboradoras que no tengan una formación legal como parte integral de tu equipo de planificación jurídica. Asegúrate de que los argumentos legales reflejen la campaña principal. Busca órdenes judiciales que sean tecnológicamente factibles y que apoyen tu causa principal.
- Mantente actualizado sobre los cambios tecnológicos, políticos o legales durante el caso. De ser necesario, reevalúa tu argumento para asegurarte de que no sea obsoleto al momento de utilizarlo.